PREPARANDO EL MARATON

Cuando alguien , una vez que conoce mi afición al atletismo, me pregunta los maratones que llevo terminados y le respondo (55) observo como se queda sorprendido y me mira como a un bicho raro. La cuenta es fácil, es casi una media de 2 maratones al año, durante 27 años que llevo corriendo , sin parar mas de una semana , incluso me es fácil distribuirlos, entre el maratón de Sevilla (26) y el resto fuera de ella( en España y el extranjero) . En mi percepción interior , lo que realmente siento es que eso no tiene mérito alguno , está al alcance de cualquiera , y es producto de un compendio de circunstancias, alguna de ellas puramente biológicas, como la adicción a "las endorfinas"(sustancia que segrega el cuerpo, cuando se realiza ejercicio aeróbico, y crea una dependencia "la ausencia" de ellas, lo que te hace "subirte por las paredes" si no sales a correr durante varios días seguidos) y otras mentales , de crearte un reto y comprometerte contigo mismo a cumplirlo , sin ningún otro tipo de "recompensa" exterior, se hace sólo por la autosatisfacción personal (hacer el maratón en determinada "marca", que puede ser :mejorar la anterior, mantenerla, ganarle a algún amigo/compañero de entrenamiento, clasificarte en determinada posición entre los de tu grupo de edad, simplemente acabar otra prueba..., hay cientos de retos personales, tanto como personas que participan).
Pero el día de la carrera es solo eso....el día....., en definitiva entre poco menos de 3 horas (en el mejor caso y ya casi imposible) y poco mas de 3 horas (lo mas habitual) y que , en definitiva, es , casi matemáticamente, el resultado de una ecuación cuyos elementos son a)tus cualidades fisiológicas innatas b) tu fuerza mental, c) lo que "hayas invertido" en el entrenamiento, y , por último, d) otra serie de factores incontrolables (climatologicos, de salud durante la carrera...etc)
Lo que de verdad es duro , y modela tu personalidad, tanto física como mental , es la preparación , que lleva, como mínimo, tres meses de preparación específica, eso sí, partiendo de una base anterior de adaptación aeróbica ( para estrenarse en un maratón, el mínimo que considero es al menos un año de correr habitualmente).
Una semana típica de mi entrenamiento consiste en cinco sesiones (cinco dias) , dicho de otro modo, puedes descansar dos días a la semana (que utilizo para realizar ejercicio rutinarios de abdominales y pesas); el único día fijo de descanso es el viernes (pues el sábado por la mañana es la sesión mas fuerte), el otro día de descanso, lo alterno de lunes a jueves, según necesidad de descanso y, sobre todo, obligaciones familiares/laborales. De los cinco dias, tres consisten en carrera continua, entre 60 y 75 minutos, a ritmo similar al del día de la prueba, el sábado "tirada larga " que consiste en carrera continua entre 20 kms mínimo y 30 kms máximo a ritmo algo inferior al del día de la prueba y el domingo algo de entrenamiento en el umbral anaeróbico (repetición de series de 1 o 2 Km, farlek, progesiones etc...,), es el día de "la calidad".
Lo duro, y es lo que trato de explicar aquí, no hacer un tratado de entrenamiento, es que ese plan es "innegociable", es decir, lo tienes que hacer como sea , sin importar para nada si tienes obligaciones familiares que cumplir (hay , como en tantas facetas de la vida, que "negociar" con la pareja ese tiempo libre, a cambio de "ceder" y/o compensar en otras ), obligaciones laborales (es fácil, o se corre antes de trabajar , aunque ello suponga levantarte a las 5,30 a.m.o después de trabajar, aunque ello suponga correr a las 22 horas , o , incluso "durante el trabajo", si estas de viaje , siempre en el equipaje no puede faltar zapatillas y ropa adecuada), cuestiones climatológicas ( es agradable correr los soleados días de primavera y otoño, pero no puedes "interrumpir" las sesiones esos días "de perro", con lluvia fuerte, viento, frio...o esas tardecitas de verano , cuando todavía rondan los 40º a las diez de la noche).
Es decir, muchos días, cuando llego a casa, quemado tras un día de duro trabajo y muchos problemas, es ya noche plena y estas cansado, lo que te apetece en tumbarte en el sofá y ver perezosamente algún informativo, o jugar un rato con tus hijos pequeños a los que no has visto en todo el día y están a punto de irse a dormir,maldita las ganas que tienes de ponerte las zapatillas y salir a pasar frío y mojarte; o qué decir de levantarte practicamente todos los sábados y domingos del año a la misma hora que si fueras a trabajar, aunque hayas trasnochado por cualquier causa la noche anterior...eso sí es duro...coger el coche a las 7,30 de la mañana , con dirección al Parque, con todo oscuro,porque te "toca" hacer 30 kms, y sólo ves a los que vienen de vuelta de "fiesta" e incluso a los están todavía. En esos momentos, si hay que tener el "recurso mental" apropiado, para no "sucumbir" a lo que te pide el cuerpo, que , sin duda, es quedarte en la cama o en el sofá.....Eso es lo verdaderamente duro del maratón....y superar ese periodo sí que te hace fuerte , no el día de la carrera, que es la culminación de un proceso, una fiesta.... aunque llegues a "cuatro patas"...

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